Had you been there tonight you might know how it feels
to be struck to the bone in a moment of breathless delight.




E-mail this post



Remember me (?)



All personal information that you provide here will be governed by the Privacy Policy of Blogger.com. More...



These songs of March, will break your heart

Tengo cerca de 13.5 gigas de música de videojuegos. Esto es poco en comparación a las colecciones de otros, pero igual, sirve para ilustrar un punto. Muchos de esos discos puede que nunca los escuche. Pero por lo pronto, tengo en una carpeta, que no he tenio el corazón de renombrar y se ha quedado simplemente como Nueva Carpeta, 26 canciones, que a lo largo del mes he estado agarrando de discos y colocando en el disco duro. A veces representa darle una mordida al chocolate y tirar el resto a la basura, pero en realidad, es una necesidad. La mayoría de los soundtracks de los videojuegos son una tortura escuchar de corrido, salvo proyectos estelares como Final Fantasy VI, que son tres discos de pura delicia. Pero incluso de ese soundtrack sólo tengo los últimos tres mp3 en el disco duro.

Y escucho este pool de canciones, junto a Hakkoichu, y algunos tracks sueltos de Train, de The Blue Hearts. Ahorita lo estoy escuchando. Y me da tristeza que muchas de estas canciones no podrían funcionar en un MIX CD. Me da tristeza porque aunque quisiera compartirlas, sin su contexto pierden fuerza y quedan nada más como canciones bonitas. Hay algunas que no se les puede discutir su belleza y otras rockean como no tienen idea; pero recordando de dónde viene cada canción, en qué momentos las escuchamos por primera vez, se trata de música para hacer llorar a fans, para que dejen todo lo que están haciendo y que escuchen con atención.

Por el momento estoy bastante encariñado con la música de Mother 2, mejor conocido como Earthbound en América. La mayoría de los tracks son números bastante directos y pegajosos, como el tema del pueblo de Onnett, que estuve tarareando toda la semana pasada (aunque es casi imposible de replicarlo con cuerdas vocales humanas); pero se han quedado conmigo algunas canciones que encapsulan más la identidad del juego. "Winters" y "Scarab" son piezas multimelódicas que en momentos son muy pegajosas, pero que a la mitad se vuelven... extrañas. Como ver la televisión y que de pronto la imagen se distorsione por segundos, para luego volver a la normalidad. No que se pongan ruidosas o incoherentes, sino que cambian de tono y dirección y uno piensa, algo está pasando aquí... Y ese es básicamente el sentimiento general de Earthbound: todo se ve muy bonito, sencillo e infantil, hasta que te topas con momentos que simplemente dan miedo, por lo inteligente que resulta ser la narrativa bajo la apariencia inocente y primitiva del juego.


Después de terminar Breakdown comencé Beyond Good and Evil. Me hizo recordar una conversación que tuve con Fer hace mucho tiempo, cuando pasé Año Nuevo con su familia. Sería mediados de los noventa, porque hablábamos de lo que esperábamos del Nintendo 64. Yo tenía en la mente una imagen muy específica de lo que quería: Megaman corriendo en unas escaleras, dentro de un castillo de paredes verdinegras iluminadas por velas. Cuando finalmente salió un juego de Nintendo 64 de Megaman, a mí ya no me interesaba la consola, y resultó ser una cosa muy primitiva. Lo que yo tenía en mente sólo se podría realizar un par de generaciones después: quería fuentes de luz reales, una cámara dinámica como la de Devil May Cry, millones de polígonos por segundo y texturas de alta resolución.

Puede que este juego de Megaman nunca se realice. Pero mientras trataba de mantener oculta a Jade en una de las primeras partes de Beyond Good and Evil, tuve que sonreir al ver la fuente de luz azul que caía sobre su rostro, mientras pegaba su cuerpo a una pared verdinegra.

Me reservo más comentarios hasta que lo pueda terminar o vaya más avanzado (tengo la sospecha de que este juego me va a tomar mucho, mucho tiempo acabarlo), pero por lo pronto puedo decir que lo estoy disfrutando inmensamente.

Otros juegos que esperan pacientemente en el disco duro son Metal Slug 5, King of Fighters 2003 y Sonic Heroes. Sí, pese a lo que había dicho en una ocasión, decidí darle otra oportunidad a Sonic Heroes. El primer nivel sigue sin gustarme, y me desespera esa manía del juego de animarte a ir más rápido, al mismo tiempo que requiere que te frenes a tronar bloques o caer en cañones.

Como sea, el juego que más me ha distraido de Beyond Good and Evil ha de ser Mario Kart en el Gamecube. Lo que me friega es que sólo tengo un control, aunque eso puede que se arregle pronto.

En estos días llega el correo con cerca de 22 dvds, por lo que me ha dado por estar despierto en las mañanas. No me agrada. La piel me arde y siento que los ojos se me van a caer. A veces ni siquiera es necesario que yo esté despierto, porque hay bastante gente en la casa que puede recibir los paquetes. Pero ya tengo todo el horario movido. Edu me dice que tome Diazepam, y me sonrío. Es lo que toma Snake en Metal Gear Solid para que no le tiemblen las manos al usar el rifle de francotirador.

Ah, está sonando esa canción... que me parte el alma.


Now playing



Elsewhere










Archives


Contact me